BBC News Mundo
"No tengo otra opción, tengo que hacerlo. Estaré peleando (por Ucrania)".
Así respondió Vitali Klitschko, alcalde de Kiev desde 2014, cuando le preguntaron si defendería a su país ante la invasión rusa que comenzó a tempranas horas este jueves.
"Creo en Ucrania, creo en mi país y creo en mi gente", añadió el hombre de 50 años, durante una intervención en el programa Good Morning Britain de la cadena británica ITV el pasado viernes.
Sobre luchar, Klitschko sabe bastante.
Pero ahora se enfrenta a una lucha muy diferente a la que solía dominar hasta el año 2012.
Muchos lo recuerdan como uno de los más grandes boxeadores de la década de los 2000, cuando él y su hermano Wladimir monopolizaron la división de peso pesado.
Uno de los boxeadores más temibles de su generación
Klitschko comenzó su carrera como boxeador en 1996, ganando en dos rondas contra Tony Bradham en Alemania.
Tres años después, en 1999, recogió el cinturón de la Organización Mundial de Boxeo al ganar su primer título mundial contra el británico Herbie Hide en Londres.
Esta victoria lo consolidó como uno de los pesos pesados más temibles de su generación.
Pese a perder una importante pelea contra el británico Lennox Lewis en 2003, Klitschko hizo historia al arrebatarle el título del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) al sudafricano Corrie Sanders en 2004. Defendió ese título 11 veces a partir de entonces.
"Ucrania me necesita"
A finales de 2013, el campeón sorprendió a sus seguidores tras renunciar a su título del CMB y anunciar que cambiaría los guantes de boxeo por la política.
El CMB decidió convertirlo entonces en "campeón emérito" para permitirle retar directamente a un nuevo campeón si quería retomar el boxeo.
Pero el entonces líder de la oposición ucraniana descartó esa opción, asegurando que era algo que no podía imaginar.
"Mi atención se centra en la política en Ucrania y siento que la gente de allí me necesita", aseguró en medio de la intensa ola de protestas de índole europeísta que sacudió al país europeo en 2013.
Los manifestantes protestaban en contra de la negativa del expresidente prorruso Viktor Yanukóvich de crear vínculos más estrechos con la Unión Europea.
Una récord Guinness
Klitschko terminó su exitosa carrera en el mundo del boxeo con un récord de 45-2 y 41 nocauts. Su última pelea fue en septiembre de 2012 cuando noqueó al alemán Manuel Charr en el cuarto asalto.
Al igual que el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, Klitschko era un novato en política antes de ser elegido alcalde de la capital ucraniana en 2014.
Hijo de un militar estacionado en Chernóbil después del desastre nuclear, tiene un doctorado en Ciencias del Deporte y habla varias lenguas.
Vitali y su hermano menor, Wladimir, entraron en el libro Guinness de los Récords como los hermanos con más victorias por el título mundial de pesos pesados.
Ahora, como alcalde de Kiev, ha tomado un papel prominente en la lucha de su país contra la invasión rusa.
Una "terrible" prueba
Klitschko se unió este viernes a los llamados del ministro de Defensa del país para que los civiles mayores de 18 años tomen las armas para defender el país.
El exboxeador aseguró que Kiev está bajo amenaza y que la ciudad ha entrado en una "fase defensiva".
"Disparos y explosiones están resonando en algunos barrios. Los saboteadores ya han entrado en Kiev. El enemigo quiere poner a la capital de rodillas y destruirnos", señaló en una rueda de prensa el viernes mientras las tropas rusas se acercaban al centro de la capital ucraniana.
Las autoridades de la capital ucraniana y las Fuerzas Armadas del país aseguraron este sábado que una serie de enfrentamientos habían estallado en las calles de Kiev.
La capital ucraniana vivió este sábado su peor amanecer desde que Rusia comenzó la invasión del territorio vecino el pasado 24 de febrero.
Desde las primeras horas del día se empezaron a escuchar explosiones en la ciudad a medida que las fuerzas rusas se acercaban.
Pero Vitali Klitschko ha asegurado que su pueblo permanecerá de pie ante la invasión.
"El pueblo ucraniano es fuerte. Y permanecerá fiel a sí mismo en esta terrible prueba. Es un pueblo con anhelo de soberanía y paz. Un pueblo que considera como hermanos al pueblo ruso", escribió en una publicación el jueves.
"El pueblo ucraniano ha elegido la democracia. Pero la democracia es un régimen frágil. La democracia no puede defenderse a sí misma; necesita la voluntad de los ciudadanos, el compromiso de todos. Básicamente, no hay democracia sin demócratas".
Recuerda que puedes recibir notificaciones de BBC Mundo. Descarga la nueva versión de nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.
Fin del contenido de YouTube, 1