Las autoridades tailandesas aseguraron este sábado que mantienen bajo control los niveles de oxígeno en la cueva donde permanecen atrapados doce niños y un adulto desde hace dos semanas en el norte del país.
Los equipos de rescate indicaron el viernes su preocupación por la bajada en los niveles de oxígeno y aumento del dióxido de carbono en la gruta donde el grupo permanece atendido por varios miembros de las tareas de salvamento.
"Hemos conseguido trasladar bombonas de oxígeno hasta la cavidad, donde han sido abiertas (…) la tarea ahora es mantener el equilibrio adecuado" entre ambos elementos para que los niños no se sientan afectados, declaró en una rueda de prensa Narongsak Ossottanakorn, gobernador de Chiang Rai.
El portavoz oficial indicó además que desde este momento solo cuatro doctores de la operación de rescate permanecerán en tareas de asistencia junto a los menores, para rebajar el consumo de oxígeno.
Los problemas con el oxígeno también se dan en la "caverna 3", donde los militares han instalado un campamento provisional.
"Solo vamos a mantener desplegado al personal estrictamente necesario", dijo Narongsak.
Las autoridades barajan dos opciones para la salida del grupo: bucear a través de los pasadizos inundados o encontrar una fisura en la montaña que sirva como puerta de salida alternativa.
"La situación es cambiante, hay que evaluar los planes. Pero hoy es uno de los mejores días, tenemos un tiempo apropiado por lo que tenemos que planificar y actuar rápido", señaló el gobernador sin aportar una fecha concreta para el inicio de las operaciones de rescate.
El nivel de agua continúa descendiendo gracias al buen tiempo, la salida natural del agua y los trabajos de drenaje artificial.
Sin embargo, las autoridades apuntan que la cantidad todavía es elevada en zonas esenciales durante el camino hacia el exterior.
"Encontramos a trece supervivientes, es nuestra pequeña victoria. Solo ganamos una batalla. La guerra continúa", dijo el regidor.
El fallecimiento del experimentado buceador sirve de ejemplo, según las autoridades, para exponer la dificultad de las tareas de salvamento a las que se enfrentan los equipos.
Los trece se internaron en las galerías el sábado 23 de junio tras un entrenamiento de fútbol cuando una súbita tormenta comenzó a inundar la cavidad y les cortó la salida.
TOMADA DE INFOBAE.COM