La blanca esperma de los franceses fecundó la negra tierra del Santo Domingo francés, al oeste del Santo Domingo español. De esa fecundación nació tanta azúcar que convirtió a "Saint Domingue" en el París del Caribe.
Tal
fue la riqueza creada a partir de la eliminación de los bosques por su
madera preciosa y para su conversión en cañaverales, que para el resto
del mundo no habían dos países en esta isla, sino uno: Saint Domingue,
con una capital francesa: Port-au-Prince; y ciudades de riqueza y
lujuria tropical, como Jacmel y Cap Haitien.
El París del Caribe sucumbió a partir del 1794, cuanto Toussaint Louverture sublevó la población esclava, que
en mayoría arrolladora acabó con la dominación francesa, acabando de
paso con la economía azucarera e iniciando un proceso de liberación que
culminó con la independencia en 1804.
En lo adelante, convertida en la "Repiblik Haití", la parte oeste de La Hispaniola inició una lenta construcción de una cultura de supervivencia que la ha llevado al extremo de un exterminio ecológico comenzado por los francesescon
la tala indiscriminada de bosques y el saqueo de sus recursos
naturales. En Paris todavía se exhiben en Museos, la madera preciosa
haitiana.
Trastocando
información - con un propósito subterráneo- los medios de comunicación
de masas presentan a la nación haitiana como el peor ejemplo del manejo
de su naturaleza, cuando en realidad fue el saqueo y la
industria azucarera la que originó el gran problema actual haitiano, al
eliminar los bosques para sustituirlos por cañaverales que mantenían
unos 300 ingenios de azúcar, en tiempos en que la parte que hoy es
dominicana tenía 5 ingenios.
La
población esclava de "Saint Domingue" -inculta, recién liberada y
teniendo la libertad y la posibilidad de hacer lo que viniera en ganas no tuvo otra alternativa económica que la de utilizar los recursos a mano para sobrevivir "a lo africano", utilizando
para energía lo que quedaba de bosques, cazando todo lo que se moviera,
pescando todo lo que nadaba y consumiéndolo todo sin la menor idea -como era normal en esa época- de que tiempo después se habría de inventar " la Ecología ", una
especie de ley que les pasaría cuentas por los crímenes a la
naturaleza, aunque hubieran sido cometidos por ignorancia y aplicándose
con carácter retroactivo.
La
devastación de Haití no es solo consecuencia de su situación económica
-como dicen los medios de comunicación- , es al revés. La situación
económica de Haití es consecuencia de su devastación ecológica.
Si Haití poseyera sus recursos naturales no hubiera tanta hambre, que a fin de cuentas es el mayor problema actual. Si
se hubieran manejado adecuadamente sus bosques tuvieran ríos; si no se
hubieran sobreexplotado sus recursos marinos tuvieran peces; si no se
hubieran quemado sus manglares para carbón tuvieran millones de
crustáceos; si no se hubieran erosionado sus suelos por causa de la
deforestación tuvieran tierras para sembrar. Pero ese fue el
camino trillado por el "desarrollo" azucarero del siglo XVIII, y este
estado actual de Haití es su culminación.
Consecuencias de la destrucción de los recursos naturales en Haití: Una
vez que la riqueza de Haití desapareció producto de la destrucción de
los bosques y del saqueo, Haití perdió su atractivo para las potencias
occidentales y se empobreció. Le sacaron el jugo, dejaron el bagaso y lo
abandonaron a su suerte.
La
pobreza es la responsable por la destrucción de los recursos naturales
en Haití. Para sobrevivir los haitianos han acabado con su fauna, la
flora, el plantum del mar, los bosques, los ríos y suelos fértiles.Haití
es hoy, el mayor desastre ecológico del hemisferio y la nación más
pobre de América, con un crecimiento negativo acumulado de más de 20
años. La pobreza es el enemigo #1 de la ecología y el medio ambiente
El ecosistema de toda la isla esta amenazado.
Del
lado haitiano la deforestación abarca más del 80% del territorio. Del
lado dominicano, en la foto de satélite se observa una deforestación
progresiva de un 50% en la frontera, producto de la migración
de campesinos nómadas haitianos y dominicanos que cruzan en busca de
árboles para hacer carbón para la venta. Al ritmo que vamos parte de la isla Hispaniola se podría convertir en el primer desierto del Caribe en 20 años.
Salvar el Artibonito:
La
suerte del Artibonito es la suerte de toda la isla. Si la economía de
Haití se torna peor y en caso de que muera el río artibonito,
aumentaría la emigración forzara de los agricultores, huyendo del
hambre, hacia la Rep. Dominicana. La
pobreza y el hambre explican muchos sucesos históricos de la humanidad,
como guerras, emigraciones, revoluciones, etc. Fue el hambre lo que
motivo la revolucion francesa.
Desde el aire puede verse, el contraste entre el paisaje seco de Haití con el verdor de Republica Dominicana. En
el centro se ve un cordón verdoso que se extiende a todo lo largo de
Haití, en dirección al golfo de Gonaive. Esa franja verde son los
árboles y los campos del valle que forman el área de influencia del Río
Artibonito, uno de los pocos ríos que quedan en el país, pues las selvas
de tiempos pasados han sido sustituidas por las rocas y el lodo.
En
la actualidad la franja verde del Artibonito esta en peligro. Ese
verdor depende del río. Pero el río esta amenazado por la deforestación y
se esta muriendo. Se ve la marca de la deforestación. La tierra fértil a lo largo de un río muerto, también morirá.
- El artibonito es el río más caudaloso de Haití y lleva vida a muchos hogares.
- El rió es el único que nace del lado dominicano y llega al mar por el otro.
Ambas naciones debemos luchar por salva el río Artibonito
Haití y La Republica Dominicana :
El
planteamiento desarrollista que se le presenta a la República
Dominicana hoy viene a ser muy similar -sino el mismo- que el que se le
presentó al "Saint Domingue" francés hace casi 300 años.
Se insiste en sacrificar a la naturaleza en aras de un desarrollo que no garantiza las expectativas para las generaciones futuras en términos de la existencia de recursos naturales.
- Se insiste en destruir los recursos naturales: bosques, costas, manglares, minerales, aguas y fauna tienen que ser puestos al servicio de la gente ahora, al servicio de una humanidad que no suma 10 millones de seres, cuando las generaciones que vienen sumarán varias decenas de millones de aquí a 300 años.
Así
como desapareció la industria azucarera dominicana, a menos de 100 años
de vida, van a desaparecer más rápidamente aún muchas otras propuestas
económicas actuales. Y
si esas propuestas de desarrollo se llevan lo que nos queda de recursos
naturales, habremos acabado con el presente y con el futuro, tal como
ocurrió en Haití.
Al ritmo que vamos, en vez de uno, seremos dos, los países más pobres de América. Volveremos a llamarnos por el nombre con el cual Núñez de Cáceres nos bautizó : Haití Español.
La garantía de que alguna vez tengamos economías saludables es la permanencia de nuestros recursos naturales.
Nuestra responsabilidad como generación actual es el establecimiento de
mecanismos sostenibles de uso de los recursos como los mineros, ya que
no son renovables, así como desestimar aquellos proyectos mineros y
hoteleros que atentan contra las zonas de vida claramente definidas como
fundamentales para la permanencia de recursos como la vegetación, los
suelos, la vida marina y las aguas subterráneas.
Haití es responsabilidad histórica de Francia
Francia,
tiene una deuda histórica con Haití, pero no han pagado y se han hechos
los locos. Sólo le han llevado más sufrimiento y miseria al pueblo.
El pueblo haitiano fue el primer país del continente que se libera en 1804, de Francia y lucha contra las tropas napoleónicas; es el primer grito de libertad continental de los esclavos en la colonia francesa.
Sin embargo, para lograr el reconocimiento internacional a su independencia,Francia
obligó a Haití a pagar una indemnización de 150 millones de francos
oro, siendo posteriormente rebajada a 90 millones, en 1838, precio que
terminó de pagarse en 1883. Es un pueblo que lleva más de 200 años de resistencia y que lucha por su libertad.
Recursos
que debieran ser destinados a paliar el hambre y la pobreza del pueblo
haitiano, a la educación, salud y desarrollo, van a las grandes
corporaciones y organismos internacionales que sólo buscan sus propios
intereses. La perversión y explotación tienen muchas formas de
manifestarse.
( ¿Quién
ayuda a quién? -El Banco Mundial y el FMI han obligado al gobierno de
Haití a pagar millones de dólares como pago de la intereses de la deuda
externa y recibe a cambio pocos millones de dólares de prestamos de la
UE. - Nota: Este articulo fue escrito en el 2005, es decir 10 años antes de terremoto del 2010 ) -
Los
contrastes son de tal magnitud, de pobreza y olvidos, que duelen en el
alma, al ver un país devastado y saqueado sin piedad con total y
absoluta impunidad, por gobiernos locales corruptos y por intereses
económicos extranjeros, que traicionaron las aspiraciones del pueblo.
Solución a corto y mediano plazo:
Los condenados de la tierra, a pesar de todas las dificultades, no han claudicado. Tienen la capacidad de la resistencia social y cultural y luchan por revertir la situación actual
Algunos de los pasos necesarios a dar, con urgencia, son:
- Reclamar la cancelación de la Deuda Externa total de Haití; que esos recursos sean invertidos para la vida y desarrollo del pueblo. Los organismos internacionales deben actuar con responsabilidad y sentido ético y tomar decisiones políticas en bien del pueblo haitiano.
- Debe concretarse el envío de los recursos de la ayuda humanitaria y financiera para construir la infraestructura que el país requiere, para la construcción de carreteras y fuentes de trabajo genuino, educación, salud y capacitación técnica.
La asistencia es necesaria en momentos de fuerte crisis social, pero la ayuda humanitaria en funditas de comida, solo lleva a la degradación humana, a la dependencia y no a la promoción y desarrollo del pueblo.
La Republica Dominicana, debe verse reflejada en el espejo de Haití. La"Repiblik Haití", es un claro ejemplo de destrucción y saqueo ecológico que puede destruirnos.