Viejo es el viento y aun levanta el polvo… Los que creían que Manny Pacquiao había terminado a los 40 años, que se sienten de nuevo, que la función va a empezar.
Durante la madrugada del domingo en el MGM de Las Vegas el público no pudo verlo noquear como ocurrió en Malasia en julio, cuando en su penúltima salida dispuso del argentino Lucas Matthysse con un sorprendente nocaut sellando otra reconquista del trono welter, pero de todas maneras los gritos y aplausos volvieron a ser suyo durante la lección de boxeo que le impartió al extriple campeón mundial y 11 años más joven, Adrien Broner.
De inmediato una vieja cuenta regresó a sus manos y tras escuchar la votación unánime que le dejaba en poder de la corona AMB de las 147 libras le lanzó un reto de revancha, para que regrese al boxeo, a su archirrival Floyd Mayweather Jr., otro cuarentón que en 2015 le infligió una derrota que no olvida, pero tampoco el público insatisfecho, que pagó los tickets más caros de su vida para ser testigos del combate más millonario de la historia, resultando un espectáculo caprichoso y frio, con gran pobreza de ambos.
PIDE REGRESO A MAYWEATHER
Como en sus mejores días, Pacquiao (60-7-2, 39KOs) protagonizó su pelea número 70 y manejó un jab enloquecedor junto a combinaciones relampagueantes que dejaron en mal estado a Broner en los rounds 7 y 9.
El senador filipino parece redondear una sin igual carrera profesional de 24 años que lo ha colocado como el único boxeador en la historia en ganar coronas en 7 categorías distintas: mosca, supergallo, ligero jr., liviano, superligero, welter, mediano jr., incluyendo cuatro reinados en el majestuoso peso welter.
Broner (33-3-1, 24KOs) es unos de los hombres más jóvenes en juntar varios títulos mundiales, pero rebuznó en medio de su clara derrota (según los jueces que votaron 117-111 y dos veces 116-112, los tres a favor del campeón) pero en algo tuvo razón: “Lo que quieren hacer es buscar dinero con Pacquiao y Mayweather, pero yo no estoy preocupado por eso; todo el mundo sabe allá fuera que yo fui el ganador esta noche”.
Segundos más tarde Pacquiao confirmó su denuncia y “reveló” el secreto que sabe todo el mundo del boxeo: “Ahí está, dígale que vuelva al ring y peleamos”, solicitó el rey filipino a su entrevistador de la cadena de transmisiones Showtime.
En un lugar exclusivo del ring side estaba Mayweather muy “serio” y totalmente indiferente al pedido de Pacquiao y del periodista que le sugirió desde el ring que si aceptaba el reto del oriental que lo consintiera moviendo la cabeza y, el todavía invicto policampeón, elevó su egocentrismo con un silencio desconsiderado.
