Un estudiante de la Universidad de Ontario reveló que su teléfono Samsung Galaxy Ace 2
explotó mientras ella dormía. El incidente, que ocurrió en octubre,
sólo salió a la luz cuando los medios de comunicación locales informaron
el pasado lunes.
Hope Casserly dijo que se despertó a las 1:30 de la madrugada el 22
octubre por una explosión que ocurrió en la batería de su teléfono,
informó CBC News.
El teléfono no estaba cargando y estaba sobre su mesa de noche, con la pantalla hacia arriba.
Ella inmediatamente entro en contacto con Samsung, que envió el teléfono a Corea para investigación. “Hemos proporcionado al cliente con un dispositivo de reemplazo y estaremos siguiendo con el cliente para resolver el asunto”, dijo un representante de Samsung.
La empresa alegó que la batería en el teléfono no era genuina e instó a la gente a usar baterías exclusivas de la marca.
Casserly, sin embargo, quiere que Samsung pague por su colchón dañado y ropa de cama que le costó poco más de $1,000 dólares canadienses.
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